lunes, octubre 02, 2006

Paura Nella Città dei Morti Viventi : Spagueti Zombie

Un cura, algo revenido, se suicida colgándose de un pino en la ciudad norteamericana de Dunwich, ciudad asentada sobre un viejo asentamiento de brujas. Este hecho es la señal para que las puertas del averno se abran, liberando a los muertos del sueño eterno, haciéndoles retornar al mundo para terror de los vivos. Mientras, en Nueva York, un periodista salva a una hermosa joven, a la que todos crían muerta tras una sesión de espiritismo, de ser enterrada viva. Dicho periodista y la susodicha joven partirán a la difícil labor de evitar que los muertos dominen la tierra. Así es “Paura Nella Città dei Morti Viventi” (Miedo en la ciudad de los muertos vivientes en su edición española). Película dirigida y escrita por el incombustible y oportunista Lucio Fulci en 1980, quien logra esta vez su película más compacta, fluida e interesante. Bien realizada y evidentemente amena, “Paura Nella Città dei Morti Viventi” es una película pobre en matices y borrosa en su argumentación. Aunque bien desarrollada, se echan en falta muchos “por ques”, quedando sin explicación gran parte de lo acaecido. Intérpretes mediocres y música delirante, del italiano Fabio Frizzi, son lo peor de la película que, sin embargo, no la hacen desmerecer del todo, remontando el interés a golpe de buen gore, explícito y gratuito, de manos del maestro Gino de Rossi. Y es que Fulci va tras la nausea sin motivo, a por el desagrado mayúsculo y el sobresalto desasosegado. Tanto es así que esta película no se estrenó completa en ningún país, pues el trabajo que ofrecía a los censores de la época no era baladí. De hecho podréis encontrarla en la red, completa, sí, pero con escenas en aleman, otras en italiano, en español...un retal internacional como escape a la censura. Por que escenas duras tiene unas cuantas, como muestra un botón : Cuando el cura zombie “hipnotiza” a una joven hacéndole vomitar todo su aparato digestivo. Uf, hay que hacer de tripas corazón... No queda duda de Que Fulci es un cerdo oportunista que buscó el lucro a la estela del tirón del género zombie, pero no fue el único, además de hacerlo bien y de regalarnos no pocas escenas antológicas. Será un hijo de puta, sí, pero es nuestro hijo de puta. Sin duda la mejor, o menos mala para algunos, criatura de Fulci. Suerte con ella.