The Brood : No mosquees a mi esposa...

En 1979 David Cronenberg da el salto con The Brood ( que algún sopla gaitas decidió re titular “Cromosoma 3” en España) del cine marginal al profesional, facturando un film canadiense compacto, intrigante y con un ritmo constante. Destaca desde un principio la estética, que es elemento activo de la narración, superando su función habitual de marco de esa acción. Detalles cuidados hasta el extremo en dicha estética dan un empaque inusitado para una película de “ficción” o de “terror”, (la comisaría de policía recuerda a mi escuela de diseño...), además de ayudar a introducirnos plenamente en la trama argumental. Es esta una película que engancha desde un principio y se va tornando más interesante según se acerca el final, que es, posiblemente, lo más intrigante de todo el film. La historia que narra, a grandes rasgos, es la de un hombre que tiene a su esposa en una extraña terapia siquiátrica, pues se le va la olla cosa mala, teniendo que hacerse cargo de la hija de ambos. En dicha terapia un doctor carismático, que despierta odios y admiraciones entre la comunidad, logra que la paciente desate todo su odio contenido, pero ¡tatachán! se le escapa el tema de las manos y gente que la paciente odia comienza a morir a manos de unos pequeños y grimosos seres. Peliculón para tu sofá, pequeño.

The Day After : Parrillada Nuclear.

Dios bendiga el cataclismo atómico, hermanas y hermanos, pues ha inspirado decenas de películas para regocijo y deleite de los seguidores del Cine de Sofá y la inactividad neuronal. The Day after, “el Día Después” en España, película de 1983, es una de las mejores entre este elenco radiactivo. Me inclino ante Nicholas Meyer, director de la misma, y su buen hacer, pues en un género tan proclive al desinterés técnico y a la argumentación insustancial, Meyer logró un film de un ritmo acertado (magnífico durante la primera hora) , con argumento, personajes y diálogos creíbles y con una tensión emocional bien dosificada durante todo el metraje. The Day After narra la historia de unos ciudadanos estadounidenses que contemplan impotentes por los medios de comunicación como el mundo se abalanza hacia un conflicto nuclear, y como este conflicto explota truncando definitivamente sus destinos, sumiéndolos en un caos de dolor e indefensión del que nadie sabe como salir. Lo Mágico de esta película es que, siendo una Película de Sofá y retueste vegetativo, esto es, de entretenimiento, trasciende, metamorfoseándose en una buena película para públicos más exigentes, sin dejar de ser por ello una película para el espectador costra*. Eso si, las limitaciones técnicas propias de la época se dejan notar en momentos dados, pero si esta película se hubiese rodado con los medios actuales...señor, otro gallo cantaría. Si es que... la Guerra contra el Terrorismo es aburrida ¡Que vuelva la Guerra Fría! *Costra : Persona adherida a su sofá.

The Omega Man : Ese chico triste y solitario.

1975, La Unión Soviética y China entran en guerra. A su vez, sin saberse bien el por que, un agente bacteriológico comienza a causar estragos en EEUU. La gente cae muerta por la calle tras una agobiante asfixia. En poco tiempo todos han muerto. ¿TODOS? No, un médico militar, el coronel Neville, que estudiaba el remedio para ese agente, consiguió inyectarse una vacuna antes de que fuera demasiado tarde. Salva el trasero, sí, pero descubre algo terrible : Hay más supervivientes, pero han degenerado en mutantes albinos hipersensibles a la luz que le detestan, pues es el último recuerdo de lo que fue el pasado. Estos mutantes están organizados en una logia mafioso-masónica llamada La Familia y, debido a su hipersensibilidad lumínica sólo actúan de noche. Así que el Coronel Neville se mueve por el día, atrincherándose en su piso, decorado al estilo “barroco de barrio”, por las noches, donde habla con un busto de Mc Arthur y se emborracha mientras juega al ajedrez consigo mismo. Apasionante vida la suya. The Omega Man, “El último hombre vivo” en su edición española, es una auténtica y genuina Película de Sofá, ganchitos y naranjada. Rodada en 1971 bajo la dirección de Boris Sagal, cuenta con el valor seguro de Charlton Heston como actor protagonista. Enmarcada en esa apasionante vertiente del cine de ciencia ficción llamado “cine catastrofista”, sobresale del común denominador del género por su ritmo constante, si bien comparte con dicho común denominador lo chabacano en la producción , y lo cutre en la realización ,con momentos en los que uno piensa, “¡Vamos, hombre, no me jodas!"(los mutantes son una muestra de cómo no hay que maquillar). Pero es un peliculón frycandélico, si señores, y Charlton, metralleta en mano, es siempre una delicia. ¿Recomendaciones? Las habituales, ya sabéis que el Cine de Sofá va parejo al aperitivo y snackeo*. Disfrútenla. *Snackeo: del Ingles Snack. Acto de ingerir masivamente snacks.

Los Colegas del Barrio : de estereotipos vive el hombre.

Si eres unos de los miles de afectados por la película "Crash" de Paul Haggis, por su desgarrado drama racial, por la pesadilla urbana que en ella se plasma, y por la enmarañada red de personajes en busca de redención o castigo a través de sus actos, tengo algo para ti: “Don´t Be a Menace to South Central While Drinking your Juice in the Hood”, ni más ni menos, este es el título original de “Los colegas del barrio”, película de Paris Barclay rodada en 1996. Normalmente reniego de las traducciones del título original, pero en esta ocasión...guardaré un respetuoso silencio. Despacito y buena letra. Esta película es bazofia de la buena, con sello de UE que acredita que es un bodrio de rigor, pero eso si, te ríes, y eso, tal y como está el patio, es de agradecer. Dicho esto, puedo comenzar. “Los colegas del Barrio” es una parodia del cine de negros, por negros y para negros. De los clichés enquistados en dichas películas: el lenguaje callejero, las armas y la violencia, la presión policial racista, las fiestas con pibones a diestro y siniestro, la ropa y complementos, los personajes típicos y tópicos, los coches “tuneados” al estilo L.A....y todo lo que puedas imaginar dentro de ese universo. Normalmente las comedias de esta guisa suelen tener altibajos humorísticos que te hacen darte cuenta , durante los momentos de “baja intensidad”, de que estas viendo basura, pero “Los colegas del barrio” mantiene un nivel alto a este respecto, y sólo te percatas de lo calañera* que es la película unas dos horas después de haberla visto. Por supuesto que tiene golpes mejores que otros, eso es algo intrínseco a este tipo de cine, pero no te arrepientes de haberla visto, y eso no se puede decir de muchas cintas de este género. Un consejo: amigos y birra. Se que lo digo siempre, pero así es el Cine de Sofá. * Calañera: De Calaña, del latín Clañum. Ruin, de baja moral. Dícese también de personas o actos mal intencionados.

Logan´s Run : La crisis de los 30.

Una ciudad abovedada donde todo el mundo es guapo y joven. Donde se vive por y para el placer. En ella los individuos son criados al estilo Pol-Potiano, sin padre y sin madre, y viven despreocupada y ociosamente hasta, carámbanos y retruécanos, los 30 años, pues deben suicidarse en una ceremonia, mística a la par que hortera, llamada Carrusel, por la cual, siempre según la versión oficial instaurada en ese paraíso vallado, uno no muere, sino que se “renueva”, volviendo a nacer. Como es lógico, donde hay una norma hay alguien que la infringe , y no son pocos los que se resisten a morir a tan temprana edad. El problema es que los habitantes de tan atípico lugar llevan implantados unos cristales en la palma de la mano que indican tanto su proximidad a la edad fatal como su posición exacta dentro de la ciudad a los vigilantes encargados de que nadie escape a la macabra ceremonia del Carrusel. Uno de estos vigilantes descubre algo, una verdad oculta que le hace desconfiar de la verdad oficial. Algo que le lleva a traicionar a sus compañeros y a emprender una loca huida hacia lo desconocido. Así es La Fuga de Logan, título en su edición española, dirigida por Michael Andreson en 1976, sobre un guión apasionante de David Zelgag Goodman. Una mierda de peli para muchos, una obra maestra para otros, incluido un servidor. Sin Duda esta cinta tiene momentos cutres hasta el hastío, más que nada debidos a la estética kich que envuelve el conjunto, y planteamientos algo infantiles, por no hablar de lo evidentemente patéticas que resultan, puntualmente, las maquetas de la ciudad. Pero hay en ella algo de ingenuidad, pese a su evidente erotismo, algo virginal que la convierte en un clásico. Pero pese a su deficiente resolución técnica es, ante todo, una buena historia contada con un ritmo acertado que engancha de principio a fin. Una excelente pieza para los amantes más ortodoxos del Cine de Sofá, mata y amodorre. Seguramente que os sea difícil haceros son ella por canales legales, esto es, un video club, pero para ello están los P2P de internet, aunque olvidaros de verla en VOS.

Bad Lieutenant : Cuesta abajo y sin frenos.

Un teniente de policía en la ciudad de New York adicto a la coca, el crack, la heroína, el alcohol y bastante salido, le debe a un corredor de apuestas una gran suma de dinero, justo cuando se ofrece una buena recompensa por resolver el caso de una monja violada en plena sacristía. Autodestrucción, remordimientos, perdón y redención atormentarán a este politoxicómano sin solución en una película que hubiese firmado sin problemas Charles Bukowski. Así se las gasta Abel Ferrara, director de la criatura, con su pobre personaje protagonista, al que pone al borde de si mismo durante toda la película. El centro gravitatorio, visceral y emotivo de esta cinta es, sin lugar a dudas, Harvey Keitel el actor que interpreta a nuestro teniente hedonista en su hundimiento particular en la mugre del crimen y el dinero fácil. Su interpretación alcanza cotas de grandeza en los momentos en que el personaje asimila su derrota y su ruina moral, y todo aquel que se haya pillado una cogorza desmesurada como las que se engancha el Teniente asentirá conmigo en que el actor borda esos momentos de delirio yonki con que nos asombra. Haceros con ella en vuestro videoclub más cercano, y si podéis en VOS, esta película se merece el esfuerzo, chicos. Y esconder esas cosas malas que guardáis para la fiesta del finde, por que viendo la peli os van a entrar ganas de arrasar con todo.

Red Dawn : La Guerra que no fue.

Red Dawn, Amanecer Rojo, es una de esas películas que parten de una muy buena idea pero que adolecen de una producción mediocre y una realización simplista, los dos ingredientes básicos para crear un caldo de cultivo idóneo para que el Cine de Sofá , birra y tueste eclosione. John Milius, director de esta cinta de 1984, plantea lo siguiente: La Unión Soviética, apoyada por sus aliados latinoamericanos, comienza una guerra convencional contra Estados Unidos, invadiendo su suelo, frente a la pasividad de Europa, salvo Gran Bretaña, claro. En este contexto un grupo de jóvenes, pero sobradamente preparados, planta cara al Ejército Rojo al más puro estilo guerrillero. ¿Suena bien, verdad? Pipas, snacks, cerveza, unos amigos y la Tercera Guerra Mundial. Pero, aún siendo una irrefutable obra del cine poligonero, encuentro necesario comentar unas cuantas cosas. El ritmo varía demasiado y se torna tedioso en algún momento dado. Los lloriqueos infantiles repetidos en exceso me enervan. No resulta creíble como unos 10 muchachos pueden matar cientos y cientos de rusos sin despenarse, amén de no explicarse de donde salen los pertrechos militares que utilizan. Mención de Honor merece el director de fotografía, Ric Waite, que hace un trabajo paisajista estupendo, lástima que el guión no le de más de si, pues en las escenas rollo MacGyver o Equipo A poco podía hacer. En fin, no es mi preferida dentro del variado, rico y versátil mundo del Cine de Sofá, pero ya sabéis, todo es darle a la birra y os parecerá sublime.

Night of the Comet : Polvo eres y en polvo te convertirás.

Os presento una pequeña joya de Sofá, The night of the comet, dirigida en 1984 por Thom Eberhardt. Es difícil de encontrar hasta en los videoclubes más roñosos de Villaverde, pero le encontraréis en cero coma en la red, yo me hice con ella en el e-mule en tan sólo 12 horas. Un cometa, que hace la tira de siglos que no se acercaba de visita por la tierra (la última vez fue, que curioso, cuando los dinosaurios se extinguieron), se acerca. La gente se arma de abalorios varios y banderitas para recibirlo, pensando: “Que lindo espectáculo”, sin imaginarse que una exposición directa a dicho cometa les pulverizará, literalmente, y una exposición parcial los convertirá en zombies polvorientos durante tres o cuatro días, el tiempo que se tarda, se ve, en pulverizarse el cuerpo humano. Tan sólo los que hayan estado protegidos por el aluminio salvarán sus traseros. Dos hermanas, cada una por su lado, y un camionero logran salvar el pescuezo, descubriendo que la ciudad de Los Ángeles está desierta ,quitando los Zombies Polvorientos de Tiempo Limitado ( ZPTL ) y algún que otro macarra ciber-punk a la moda. Unos científicos, en su base, no lejos de L.A., han sido expuestos parcialmente, lo justo para saber que pronto comenzará su transformación en ZPTL, pero,¡bendito progreso! , descubren que con la sangre de los “no infectados” pueden hacer un suero que les mantenga lejos de la transformación, y se encaminan a L.A. para capturar a los supervivientes. Así que nuestros intrépidos jovenzuelos, alegre muchachada, deberán verse las caras con susodichos científicos. Esta no es una película de Zombies, pues salen pocos (dos, uno de ellos el único negro de la peli ) y son bastante cutres, además no son muertos renacidos come cerebros, si no pobres desgraciados que van transformándose en polvo poco a poco y eso, seguro, tiene que enfadar a cualquiera. Se encuadra más bien en esa ola de pelis catastrofistas setenteras donde la humanidad se viene abajo por una guerra nuclear o una hecatombe natural. La cinta tiene momentos estelares y horteradas que cortan la respiración, pero cumple los requisitos para ser una auténtica Película de Sofá. Lo mejor: la estética, 80s barroco hasta el extremo y los planos de L.A. desierta, así como las protagonistas, que están espléndidas en su papel de rubias masca chicle. Lo peor: El efectismo exagerado cuando el cometa pasa al lado de la tierra. Pero se puede perdonar, los medios no daban para más. Falta, en mi opinión, un final más vibrante. Sin duda una excelente obra para un lunes noche en tu sofá preferido.

¡¡¡Corre, corre, que te pilla el zombie!!!

El siglo XXI trajo consigo el resurgir de un género maldito, el Zombie, y eso, para los amantes del sofá, el amodorre y el encefalograma plano, fue una buena noticia, una noticia excelente. Con sus más y con sus menos, sus aciertos y sus errores, el regreso de estos mugrientos muertos come cerebros ha supuesto un paso a delante en el género, una superación de la auto marginación de sus progenitores de las décadas pasadas, Es, ahora, un género orgulloso de si mismo, conocedor de sus limitaciones, pero dispuesto a superarlas. Cuatro títulos reinan sobre el resto, cuatro buenas películas de zombies para disfrutar en tu salón, con amigos y birra, que harán que ni te levantes a mear. 28 días después: Película británico-holandesa-estadounidense, dirigida por Danny Boyle, ( el director de Transpoting y la Playa, entre otras ) estrenada en España a mediados de 2003,es, de entre las cuatro, la más hermosa visualmente. En ella los tiparracos que persiguen a los protagonistas no son zombies, en su sentido ortodoxo ( aunque si te los encuentras en Gran Vía vas a pensar : “coño, ¡Zombies!”) , sino “infectados”. La infección, que en la película arrasa Gran Bretaña, tiene su origen en unos monos que liberan unos integristas de los derechos animales y que transmiten una rabia incontrolada y asesina a través de la sangre. El protagonista ( que en su versión doblada al castellano tiene la voz que doblaba, en sus las pelis más añejas, a Bruce Lee), despierta de un coma 28 días después de el brote, y se enfrenta a una realidad desconocida, una ciudad silenciosa, Londres, vacía, fantasmal. Tras juntarse con otros supervivientes y tener diferentes y vibrantes encontronazos con los “infectados” a lo largo y ancho la apocalíptica Londres, deciden abandonar la ciudad para dirigirse a un acuartelamiento militar, que, por la radio, promete protección. Hasta ese punto es una sobresaliente película, con imágenes bellas, desconocidas para el género, lástima que a partir de entonces decaiga, atrapada por tópicos de género, en una cinta vulgar. Una pena que la imaginación brillante que iluminó el proyecto llegase sólo hasta la mitad de la historia. El amanecer de los muertos: Back Zinder presenta una película compacta, directa, contundente y sin pretensiones. Aparecida en EEUU y en España en 2004 , presenta todos los ingredientes que los amantes del sofá exigimos para nuestras noches de embolia, consiguiendo un estado de tensión emocional más o menos homogéneo durante todo el metraje. Pero esta película va más allá, pues presenta una calidad visual, en su conjunto, superior a sus congéneres. Comienza vibrante y prometedora, y, como es habitual, va decayendo, dejándonos la sensación de que podría haber sido mejor, pero que no estuvo mal. ¿Tópicos? Los que quieras: el supermercado (algo que, como recurso argumental, funciona, pues todos hemos imaginado alguna vez una situación similar) donde los personajes hacen lo que quieren, la protagonista guapa y el protagonista guapo que terminan liados, el tipo que va de duro y que luego es un trozo de pan, el cerdo egoísta que se la juega al grupo, el final, rollo “Equipo A” , con el camión anti zobies...Personajes planos y argumento previsible vaya, pero no se le pueden pedir peras al olmo, y si no te gusta hay un montón de blogs en la red de gente pedante hablando de “Delicatesen” con los que seguro te sentirás más a gusto. Acompáñala con unos nachos y te sabrá mejor, comprobado. Shaun of the Dead (Zombie Party): Desde el comienzo de esta película sentí me encontraba ante una joya del cine de sofá. Edgar Wright, director de esta película estrenada en 2004, había conseguido hacer una película para poligoneros por poligoneros . La acción, y esto es novedad, transcurre íntegramente durante el día, en la calle, con unos personajes lejos de los tópicos heroicos del género, y se debate magníficamente entre la comedia descarada, la acción de género y el drama desgarrado. Menos espectacular que las anteriores es, sin duda, la más grata sorpresa del resurgir zombie, por su frescura y esa visión “no yanki” (que comparte con 28 días después) que la alejan del núcleo duro del género. Haceros con ella, esta se puede ver incluso bebiendo sólo agua mineral. Land of the dead: George A. Romero, director de la película y padre indiscutible del género zombie, se parapeta detrás de su propia creación, escudado por todos y cada uno de sus tópicos y lugares comunes para realizar una revisión ,una apuesta segura y casi cobarde, de su clásico indiscutible. Clásica hasta decir basta cumple su función, entretener, a base de una acción y una ambientación bien logradas y una excelente producción. Las únicas pinceladas de innovación las aportan unos zombies que, poco a poco, comienzan a utilizar sus podridos cerebros. El argumento, si imagináis un poco, como esos zombies, lo podréis predecir sin miedo a equivocaros. Una peli para pasar el rato, que se ve mejor entre amigos y litronas. En fin, que vuelven los zombies, y que mejor que ver el Apocalipsis desde el salón de tu casa.